Si para tus vacaciones de verano piensas en playa, aventura y comida fresca, tienes que descubrir que Victoria, Canadá te ofrece eso y mucho más. Aquí te dejo 5 razones por las que deberías planear ir en verano a esta isla que goza del clima más templado del país.
1. Vive aventuras al aire libre
Los tesoros naturales y las aventuras al aire libre son de los aspectos más destacados y característicos de Victoria y el verano es de las mejores épocas para disfrutarlos. Hay que aprovechar el clima cálido de estos meses para recorrer a pie o en bicicleta los senderos de sus parque naturales, subir a la cima panorámica de la estructura en espiral Malahat Skywalk, deslizarse en tirolesa entre los árboles del parque Wildplay o remar sobre una tabla o un kayak para ver la ciudad desde el agua. De igual forma, es una temporada placentera para pasar la noche con la naturaleza y el mar el fondo en una tienda de campaña oTENTik, situada en pleno sitio histórico de Fort Rodd Hill a los pies del faro de Fisgard; o reservar una yurta con claraboya en el huerto de Merridale Cidery & Distillery que permite disfrutar el cielo estrellado y el aroma de las manzanas.
2. Disfruta días de playa
La playa es símbolo de verano y este destino goza de varias costas donde puedes pasar el día tumbado bajo el sol y divirtiéndote. Ve a Willows, una de las playas de Victoria más populares, para sumergirte en sus aguas poco profundas, pasar un buen rato en familia en su parque con juegos mecánicos y participar en la tradición de herencia inglesa durante la fiesta anual de té Oak Bay Tea Party que tiene lugar en junio. Tampoco dejes de explorar los litorales a lo largo de la carretera escénica Dallas Road, hallarás playas donde puedes ir con tu perro, lugares para hacer kitesurf y sitios que te atraparán con sus vistas.
3. Observa ballenas y fauna marina
El verano es la mejor época para la observación de vida marina en Victoria. Así que únete a un tour de avistamiento como los que se dirigen a la Reserva Ecológica de Race Rocks, una de las principales áreas protegidas de Canadá, para aprender sobre su riqueza marina con un experto guía naturalista. Prepara tu cámara porque puede que veas saltar en el mar a una orca o nadando plácidamente especies como marsopas, ballenas grises, ballenas jorobadas o minkes; si tienes suerte, quizá mires jugueteando curiosos leones marinos o focas. ¡Es una experiencia educativa única!
4. Fascínate con hermosos jardines
Victoria reboza de vida en el verano, por lo que es una bella época para admirar las coloridas flores que abundan en la ciudad y apreciar porque es llamada la Ciudad de los Jardines. Ve a los Jardines Butchart, uno de los jardines más visitados del mundo donde suele haber espectáculos en esta temporada. Conoce los Jardines de Mariposas que son hogar de unos 6,000 especímenes que vuelan libremente entre vegetación tropical. Explora el Sitio Histórico Nacional Parque Hatley que comprende una finca de estilo eduardiano, jardines de rosas, italianos y japoneses; o visita los jardines del Centro de Horticultura del Pacífico, unos de los más importantes del país, con un jardín interactivo para niños, el jardín de bonsáis más grande de Canadá y un área de conservación con plantas en peligro de extinción.
5. Deleita tu paladar
En el verano no faltan las comidas al aire libre a base de alimentos frescos y se puede vivir plenamente el concepto de la granja a la mesa, un elemento de la escena culinaria de Victoria que se suma a la tradición rural, el aprovechamiento del mar y las tendencias modernas. Salmón rojo, moras, fresas, frambuesas, cerezas, duraznos, chabacanos y nectarinas, son algunos de los productos locales de temporada que tienes que probar.
Disfruta en estos meses de los recorridos gastronómicos a pie, en compañía de un guía, y de los mercados que se llenan de los olores, colores y sonidos de los vendedores locales. No dejes de ir al Mercado Público de Victoria, que ocupa un emblemático edificio en la bahía Hudson; deléitate con el ambiente europeo, las degustaciones y música en vivo del Oak Bay Night Market que se realiza el segundo miércoles de cada mes; y encuentra vegetales recién cosechados, carne criada éticamente, pan recién horneado y toda clase de productos artesanales en Esquimalt Farmers Market que tiene lugar de mediados de mayo a mediados de septiembre.
Sin duda los veranos en Victoria son para reconectar y recargarse de energía ¿Qué esperas para reservar tu verano victoriano?
